A un paso de la final soñada

por **monica** Sáb 11 Sep - 11:49

Mijail Youzhny es un hombre capaz de partirse la frente y hacerla sangrar en pleno partido. Conviene entonces tomárselo en serio cuando dice estar dispuesto a arruinar el partido que todos esperan, la gran final congelada desde hace 20 meses.

"Estoy listo para ser el malo. Me encantaría ser el chico malo en este caso", dijo riendo el talentoso ruso, rival del español Rafael Nadal en las semifinales del Abierto de tenis de Estados Unidos.

Lo de Youzhny no es una bravuconada, porque tiene tenis para sostener sus esperanzas. Pero aunque un Grand Slam nunca es un trámite, el US Open llega a su fin de semana de definición con la sensación de que sólo resta eso, un par de trámites más, para que el tenis tenga otra vez su final soñada.

Rafa vs. Roger, Roger vs. Rafa, esa final grande entre Nadal y Federer que no se da desde Australia 2009 y que, con que se cumplan los deseos de Youzhny o se cruce una tarde altamente inspirada del serbio Novak Djokovic, podría quedar en la nada. Federer, sin embargo, no ve muy probable que Djokovic le impida jugar su séptima final consecutiva en el Abierto de Estados Unidos.

"Es un gran jugador, y esta es la superficie que más lo favorece. Pero en los últimos tres o cuatro años no pudo superarme cuando se enfrentó a mí. Estoy esperando ese partido", dijo un confiado Federer. La seguridad del suizo, que no perdió un set en lo que va del certamen, tiene justificación. Derrotó a Djokovic diez de las 15 veces que lo enfrentó y las tres que se midieron en el US Open, entre ellas la semifinal del año pasado.

Y Federer tiene claro que su rival en la noche del domingo muy probablemente hable español. "Rafa parece estar jugando realmente bien", destacó el suizo, derrotado por el español en 14 de sus 21 enfrentamientos.

"Rafa" lo admite: está sacando como nunca, y no sabe explicar bien por qué. John McEnroe, incluso, llegó a rozar la herejía al afirmar en sus comentarios televisivos que Nadal está voleando mejor que Federer. Pero Nadal jamás pierde el respeto por el rival. Sabe que antes que un eventual Federer está un muy concreto Youzhny, un hombre de tenis talentoso y enloquecido ante el que ya perdió cuatro veces.

"Es un rival muy difícil de controlar, tiene golpes muy planos y juega muy largo. Tengo que jugar muy agresivo y sin perder pista, sacarlo un poco de su posición, de la pelota a la altura que le gusta", analizó el número uno del mundo, que batió al ruso siete de las 11 veces en las que se enfrentaron.

Youzhny, que hace cuatro años batió a Nadal en los cuartos de final del US Open, reconoce lo obvio: "Él es el número uno, ganó dos Grand Slam (en 2010), juega realmente muy, muy bien. Va a ser muy duro para mí".

Si Youzhny y Djokovic cumplen con el papel de perdedores que muchos esperan, la tarde-noche del 12 de septiembre en Nueva York tendrá reservada una página de honor en los libros de historia del tenis.

Nadal quiere ganar ese partido no sólo porque conquistaría por primera vez el US Open tras dos años consecutivos en semifinales, sino porque lo situaría junto a Fred Perry, Donald Budge, Rod Laver, Roy Emerson, Andre Agassi y el propio Federer como uno de los siete hombres capaces de ganar en los cuatro grandes escenarios del tenis.

Federer quiere ganar porque no lo hace en la final de un grande sobre Nadal desde Wimbledon 2007. También porque confirmaría que está de regreso tras un año de derrotas inesperadas. También, claro, porque sumaría 17 Grand Slam contra ocho de Nadal, una distancia interesante en esa lucha que, como admite el propio suizo, el español libra con él por el trono de tenista más exitoso de todos los tiempos.

Si Nadal gana, habrá acumulado tres Grand Slam consecutivos, una hazaña con escasos antecedentes. Si lo hace Federer, habrá empatado dos a dos en el balance de grandes de 2010: Australia y el US Open para él, Roland Garros y Wimbledon para Nadal. Y entonces habrá que colgar el cartelito de "continuará", porque nadie querrá perderse la nueva edición del duelo en 2011.

por **monica** Sáb 11 Sep - 11:51

Pues chic@s, he de confesaros que a mi la rivalidad Nadal-Federer es lo que mejor le está viniendo a un circuito como el de la ATP. Entre las chicas no hay una dominadora clara (más allá de las Williams, que sólo juegan Grand Slams), y al final la WTA ha perdido comba a tutiplén. Os acordáis de los Seles-Graf?