La cena de los solteros

[monica]

¿Qué queréis que os diga? Pues eso, que fue un desastre perder en cuartos con Serbia. Nos ganaron en el último segundo, sí, pero fueron superiores, estuvieron más concentrados en el inicio y muy acertados toda la tarde. Podemos lamentar la última jugada, aunque no se puede negar la legitimidad de su triunfo, sus virtudes, porque lo trabajaron durísimo. Son un equipazo, con un gran futuro.
Después del desastre, el tiempo se eterniza. Me costó dormir, me levanté como si no hubiese descansado y al día siguiente seguía dándole vueltas. Mis psicólogos se llaman Rodolfo y Maite. Son mis padres, pero anteayer estaban pluriempleados. Pasé con ellos toda la tarde, hasta la hora de la charla con Scariolo. Por mucho que, como deportistas, convivamos con la derrota sólo unos cuantos días menos que con las victorias (hay colegas a los que les ocurre lo contrario) no te acostumbras. No hay una pócima que borre de la cabeza recuerdos que no merecen existir, pero existen. La familia y los compañeros son el único aliado. No me quejo ni de unos ni de otros.
Todo el jueves traté de hacer cosas distintas y hablar de algo diferente del baloncesto. Me acerqué a comer al hospitality de Nike, que es patrocinador amigo, para entretenerme pero, ahí, en la mente, seguía la derrota frente a Serbia. No dejas de comerte la cabeza, porque llevas más de mes y medio entrenándote y ves cómo el sueño se esfuma en un triple de nueve metros. No es fácil digerirlo. El tiempo y volver a ganar son las soluciones.
El viernes vencimos a Eslovenia y, con ese poquito, ya estamos otra vez sonriendo. Incluso yo estoy sonriendo, que me habréis visto como enfadado a ratos durante el partido. En lo personal fue bien: ganamos, no fallé ningún tiro... El problema venía por los árbitros. Sé que no debería ofuscarme, pero no lo puedo evitar. Soy así y protesto.
Me gusta este artículo. Empezamos tristes, hablando de un desastre; la cosa se enderezó con el triunfo sobre Eslovenia y voy a acabar por alegrías. Tocó cena de solteros. Teníamos la noche libre y quedamos Ricky (con su séquito), Sergio Llull, Víctor Claver y yo. Todos los que no tenemos pareja y... Tachán, tachán... José Calderón, que sí tiene pareja y acaba de llegar. Ha aparcado un par de días la recuperación para venir a apoyarnos. Es un crack, y no lo dejo aquí escrito porque lo tenga justo delante, sino porque es verdad.

[monica]

¡Ánimo Rudy! Llevamos ya muchos años disfrutando con vuestro juego, con vuestro compañerismo, con vuestra forma de ser. Para una persona que sigue el baloncesto desde pequeña, lo que estáis haciendo es muy grande. Esto es deporte, unas veces se gana y otras no. De verdad, un abrazo sincero para ti y todos tus compañeros, así como a Calderón y al gran Pau, que seguro volveremos a ver para las Olimpiadas. Gracias por todo vuestro esfuerzo.

[Tena]

faltaba pau pero jugaban bastante bien

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