Pau Gasol, el comodín de España

por **monica** Vie 10 Sep - 16:41

Su retorno en 2011, un año antes de lo supuesto, aliviaría la angustia que genera la clasificación olímpica
Los finalistas del próximo Europeo van a Londres y sólo otros cuatro irán a un preolímpico en 2012
El Mundial ha confirmado la vulnerabilidad de La Roja, que tiene por delante a tres europeos, dos a la par y perdió con Francia
Quinteto titular: Ricky Rubio, Sergio Llull, Rudy Fernández, Felipe Reyes y Marc Gasol. Un cinco inicial de alta calidad media, pero que de hacerse realidad como primera unidad generaría dudas sobre su alcance en cualquier gran competición internacional.

En la última década, España ha contado con dos jugadores únicos, Pau Gasol y Navarro, y tres tipos desequilibrantes en su puesto dentro del ámbito FIBA, José Manuel Calderón, Garbajosa (antes de la lesión) y Rudy Fernández. La edad de oro del baloncesto se ha hecho también a partir de profesionales impecables, de suficiente garantía en su puesto, como Carlos Jiménez, o extraordinarios complementos, como Felipe Reyes y Marc Gasol. Hubo alguna excentricidad muy aislada en las convocatorias, pero el promedio de talento fue envidiable para los rivales, lo que incluye nombres como Sergio Rodríguez, Carlos Cabezas, Mumbrú, Berni Rodríguez...

De la mezcla de únicos, desequilibrantes y recambios de primer nivel nació un tiempo prodigioso cuya prolongación genera sospechas después de la eliminación en cuartos de final. No sólo por la eliminación. Reducir la desilusión a la genialidad de Teodosic supone negar la evidencia de un campeonato donde el equipo se mostró accesible en demasiadas ocasiones; un campeonato que desveló grietas en varias parcelas.

No se puede hablar estrictamente del final de un ciclo, pero extender la bonanza exige cada día mayores esfuerzos. El regreso de Pau Gasol, salvo lesión, está apalabrado para los Juegos de Londres, y Navarro, actual capitán, insistirá incluso el próximo año si el físico no le falla. Aunque hace unas horas no certificaba su retorno para 2011 su compromiso sigue vigente, como fue desde 2000. Sin ninguno de los dos, la clasificación olímpica sería un reto acorazado.

Sólo los finalistas del Europeo de 2011 se garantizan acceder a los Juegos. Tercero, cuarto, quinto y sexto recibirían billete para un preolímpico en el verano de 2012. Del séptimo para arriba, el drama, y esos registros menores, como demostró el Europeo, no son imposibles para el campeón del mundo aún vigente. España perdió con Francia, Lituania y Serbia. Sólo un bloque fornido, Grecia, cayó ante la selección de Scariolo que, como cuartofinalista, queda a la par de Rusia, Eslovenia y por detrás de Turquía, semifinalista. En definitiva, el conjunto nacional resulta vulnerable, una realidad que pesará en la decisión de Pau Gasol el próximo verano.

Víctor Claver. | Efe
El pívot de los Lakers siempre señala como objetivo primordial pelear por el oro olímpico. Su última oportunidad tiene fecha de 2012, lo que podría incitarle a acudir al Europeo de Lituania para intentar lograr la clasificación directa (finalista), un objetivo que parece difícil de alcanzar en su ausencia. Porque no sólo los jugadores únicos generan dudas, también el antaño desequilibrante Garbajosa. Ha seguido siendo titular. Ni hay un sustituto desequilibrante ni siquiera un parche lustroso. Claver todavía no lo es y Aguilar, el otro 'cuatro' de futuro, tampoco. Y también se dilata la sucesión entre bases (el regreso de Calde aliviaría el trance) y aleros. Jóvenes, pero con 24 años, como Sergio Rodríguez o Carlos Suárez siguen un proceso de maduración alejado de la rotundidad de sus antecesores o de esos serbios uno o dos años menores.

De la mezcla de jugadores únicos, desequilibrantes y recambios de primer nivel nació un tiempo prodigioso para España. De la mezcla de renuncias, infortunio y una sucesión aletargada nace una amenaza contra la que la Federación trabaja desde ayer. La primera labor del presidente, la mañana después de la decepción, fue reunirse con Navarro. El capitán se sorprende al saber que esa cita ha llegado a oídos de algún medios, y niega que hablasen de futuro, aunque es la palabra entrecomillada en la cabeza de todos. "Hay que ir a Lituania, porque hay que clasificarse para los Juegos", insistía José Luis Sáez ayer. Será la obsesión de los próximos 10 meses.